Corcho reciclado
Corcho reciclado
La mayoría de productos de corcho se obtienen a través del reciclado y posterior triturado del sobrante en la fabricación de tapones, así pues, una placa de corcho normal ya es de por si un producto fabricado mediante material reciclado.
No obstante en Barnacork vamos más allá en el concepto de sostenibilidad y economía circular.
En el 2018 iniciamos un camino con el objetivo a largo plazo de alcanzar un nivel de residuo 0, es decir, ser capaces de reaprovechar todo el residuo de corcho que generamos en los procesos productivos y utilizarlos en la producción de nuevos productos para el mercado.
Además de nuestro propio residuo y a través de la ONG “a Flote” recuperamos los tapones de desecho en bares, restaurantes y bodegas. “A Flote” es una organización para la integración de las personas en riesgo de exclusión social.
Una red de “recogedores” se ocupa de recuperar los tapones de mas de 200 establecimientos adheridos al proyecto, una vez en Barnacork, pasan por varios procesos (selección, lavado, trituración, etc) antes de su transformación en un nuevo producto.
En los dos primeros meses del 2020 hemos reciclado más de 2 toneladas de corcho que de otro modo hubieran acabado en el vertedero
Estamos hablado del reciclado de un producto que en su día ya se fabricó con material reciclado.
El corcho obtenido a través de este doble reciclaje, es hoy por hoy un corcho de granulometría variable, más denso y sobre todo con mucha mayor estabilidad dimensional que el aglomerado standard.
Es ideal para procesos de mecanizado, su mayor densidad permite trabajar más rápido y con acabados más limpios.
Mantiene prácticamente inalteradas todas las propiedades del corcho natural, tanto en el aspecto como en color y textura.
Barnacork y su compromiso con la sostenibilidad